13 junio, 2013 - Noticias y Actualidad, Tratamientos corporales, Tratamientos de Estética y Belleza
Tratamiento de neuromodulación contra la sudoración excesiva
El verano es la estación más temida por quienes padecen de hiperhidrosis: una afección motivada por un exceso de producción de las glándulas sudoríparas derivado de un fallo en el sistema nervioso simpático y que afecta al 3% de la población.
Manos, axilas y plantas de los pies son las principales áreas afectadas. Pero también, según los casos, cabeza y pecho que, con la llegada del calor, acusan aun más de lo habitual el exceso de sudoración, convirtiéndose en algo más que un problema físico: un complejo que puede llegar a afectar a las relaciones sociales.
Según la doctora Mar Mira “este mal puede presentarse sin que exista ningún antecedente y, aunque parezca que solo tiene inconvenientes físicos, si no se llega a controlar los resultados pueden afectar incluso al campo emocional”.
La neuromodulación es una de las formas más efectivas para frenar este proceso gracias a su capacidad para interceptar las órdenes que el organismo da a las glándulas. El método de aplicación es muy sencillo: Tras expandir una crema anestésica en la zona a tratar se realiza el test de Minor para detectar la sudoración y, a continuación, se infiltra el producto.
Los efectos comienzan a notarse a la semana aunque el resultado final no se obtendrá hasta pasado un mes y durarán de unos 8 a 10 meses.