30 mayo, 2013 - Tratamientos de Estética y Belleza
Programa ‘Abdomen 10’
Un protocolo contra la flacidez de la tripa
En plena primavera y con el verano a la vuelta de la esquina nuestro armario sufre un asalto en toda regla por parte de prendas que marcan o incluso dejan el abdomen más visible y con él, resurge el enemigo de la temporada: la flacidez de la tripa.
El aumento de volumen abdominal, ya sea por edad, embarazo o por haber ganado algunos kilos de más, supone una total dilatación de los tejidos. Esta pérdida de tonicidad muscular se refleja en una flacidez profunda que, inevitablemente, atrae la acumulación de grasa.
El programa ‘Abdomen 10’ se basa en un protocolo dividido en cuatro pasos para conseguir ese vientre plano tan deseado en los días de verano:
1. Ecografía abdominal: Se mide el volumen y grado de localización de la grasa, además de la existencia de fibras de colágeno capaces de ser estimuladas en caso de estar frente a un abdomen flácido.
2. Análisis de Composición Corporal con Bioimpedancia Eléctrica: El objetivo es obtener datos segmentados de la grasa, masa muscular y cantidad total de agua. De esta manera es posible conocer la cantidad de grasa que hay en cada zona individualmente, en este caso, en la tripa. Tras realizar el tratamiento, hay que volver a realizar este estudio para valorar los resultados.
3. Pauta alimenticia 100% a medida.
4. Combinación de tratamientos localizados: Triple terapia para reducir el volumen y mejorar la flacidez muscular y cutánea.
– Carboxiterapia: Se administran, mediante infiltraciones, pequeñas dosis de CO2 en la piel para reducir los tejidos grasos (a través de la ruptura de la membrana de las células grasas) y estímulo de colágeno para mejorar la flacidez. Se recomienda un mínimo de 10 sesiones cada 7-15 días.
– Electroterapia: Se aplican varios tipos de ondas y corrientes de intensidad baja mediante bandas que envuelven la zona a tratar, placas o electrodos. Esta terapia mejora el metabolismo de las grasas, reafirma la piel a nivel abdominal y modela los contornos del cuerpo. Debe realizarse cada dos semanas durante 10 sesiones aprox.
– Intralipoterapia: Infiltración de una sustancia con efecto detergente sobre las membranas celulares de los adipocitos que cundirá a la reducción del espesor de dicha grasa. Se necesitan unas 3 sesiones aproximadamente espaciadas por 1 mes.