23 octubre, 2017 - Rejuvenecimiento, Retoques
Los mejores tratamientos para cada tipo de mancha en la piel
A cada mancha su tratamiento
Hola a todos. En varias ocasiones os hemos hablado sobre cómo tratar las manchas. Hoy, en este post, os recopilamos los tratamientos más adecuados para cada tipo de mancha.
Las manchas son el tercer vértice del triángulo del envejecimiento. Tan molestas y antiestéticas (en ocasiones incluso más) como los otros dos síntomas evidentes del fotoenvejecimiento (arrugas y flacidez) y siempre con el sol como detonante número uno, sus áreas favoritas de nuestra anatomía son (para mayor desgracia) aquellas más a la vista, es decir: las frecuentemente expuestas a la intemperie: manos, cuello, escote y, por supuesto, el rostro. Es precisamente este último, por estar siempre visible, uno de los ámbitos más afectados y en el que resulta más traumática la aparición de manchas, sobre todo en los casos de hiperpigmentación (zonas más oscuras que la tez de base), muy difíciles de camuflar con maquillaje.
A partir del otoño, cuando los rayos solares pierden fuerza, es el mejor momento para ponerse manos a la obra con la “operación borrador”. El motivo: todos los tratamientos despigmentantes provocan fotosensibilidad de la región tratada que, ante la mínima caricia solar puede reaccionar con desagradables efectos rebote.
Tipos de manchas
Ante una mancha facial, lo primero es determinar su origen y clase para así poder “recetar” la solución (o soluciones) más efectiva. Porque manchas hay más de una y así, entre las más frecuentes en el rostro, se cuentan las derivadas directamente de la exposición solar (por exceso de producción de melanina -marrones- o dilatación vascular –rojizas-), las de origen hormonal (melasma) y las que quedan como secuela tras lesiones de la piel. Y, dado que cada una tiene sus peculiaridades, precisará una solución diferenciada.
· Manchas hormonales / Melasma:
Son manchas que suelen aparecer en frente, labio superior, mejillas…y cuyo origen parte de cambios hormonales (embarazos, píldora anticonceptiva, etc) y/o predisposición genética, aunque, como en toda mancha, su aparición está estimulada por la exposición a las radiaciones UV, por lo que se hacen más evidentes en verano y se aclara en invierno.
· Manchas solares:
son aquellas que aparecen con el paso del tiempo y están directamente derivadas de la acumulación de exposiciones solares. Las más frecuentes son los lentigos, de carácter melánico (marrones), pero también se pueden dar en forma de dilataciones vasculares (rojizas) que se evidencian como vasitos dilatados e incluso arañas vasculares.
· Manchas residuales post-lesiones:
Aquellas que quedan como secuela tras una lesión o inflamación en la piel, dentro de las cuales, las más frecuentes son las derivadas de granitos, acné, heridas y quemaduras con cera.
Tratamientos para cada mancha
1) Para el melasma
Habitualmente rebelde al tratamiento y, por lo general de profundidad variable, para borrar las manchas que lo conforman es preciso un protocolo que elimine el pigmento de las capas más profundas, por lo que suelen requerir una fórmula de acción combinada, a base de tratamiento de choque en consulta+ seguimiento dermocosmético en el domicilio con fórmulas despigmentantes y antioxidantes.
· Láser ablativo fraccionado píxel:
el único equipo que, hasta la fecha, ha demostrado ser realmente eficaz en el borrado de este tipo de manchas, gracias a una tecnología que ha supuesto una auténtica revolución en el mundo de los láseres promoviendo resultados equivalentes a los de los láseres ablativos clásicos (resurfacing) pero dañando muchísimo menos la piel y minimizando hasta extremos nunca vistos los posibles efectos secundarios como inflamación, hipopigmentación e hiperpigmentación, infecciones postratamiento, enrojecimiento e hinchazón y que, además de “llevarse por delante” el melasma logra mejorar notablemente el aspecto global de las pieles envejecidas y dañadas por el sol.
· También funciona muy lo último para el melasma, el Ácido Tranexámico.
· Todos los tratamientos se combinan con tratamientos de mantenimiento domiciliario con despigmentantes según fórmula magistral que se van ajustando a la respuesta y cualidades de cada piel.
2) Para las manchas solares
Proponemos una fórmula combinada que, además de borrar las manchas (tanto melánicas como producto de lesiones vasculares) ayuda a prevenir su reaparición y produce un efecto de renovación facial y de rejuvenecimiento superficial. En este caso se trabajará con:
· IPL: Luz pulsada intensa, un equipo lumínico que permite trabajar con longitudes de onda diferentes (según filtro que se le aplique) y funciona tanto por afinidad con la hemoglobina (pigmento rojo de las lesiones vasculares) como la melanina (pigmento marrón de los lentigos), ‘fulminando’ ambos tipos de manchas solares.
· Sólo en casos de lentigos “complicados”, se recetará también tratamiento de mantenimiento domiciliario con despigmentante según fórmula magistral que, igual que en el caso del melasma, se va ajusta a la respuesta de cada piel.
3) Para manchas residuales post-lesiones
Son manchas difíciles de tratar ya que pueden reaccionar oscureciéndose si realizamos tratamientos demasiado agresivos. La opción ideal son los peelings químicos asociados a un tratamiento domiciliario que mantenga los resultados y evite posibles rebrotes.
· Peeling nomelán fenol: destinado al mantenimiento del espesor del estrato córneo y a la renovación celular dermoepidérmica, apto para todo tipo de pieles. Gracias a una estudiada combinación de principios activos multi-efecto resulta menos agresivo que otros peelings. Combina fenol tamponado con tricloracetico, ácido retinoico e hidroxiacidos. Permite trabajar a distintas profundidades y además de las diversas fórmulas (de menos a más concentración) para tratar distintas manchas en consulta, cuenta con fórmulas adecuadas para la continuación del tratamiento domiciliario.