La piel es el órgano más extenso de nuestro organismo y el que cumple las funciones más variadas. No solo nos protege física y químicamente de las agresiones del medio, nos mantiene en contacto con lo que nos rodea, sintetiza vitaminas, etc.
La piel es, por lo tanto, el reflejo de cómo funciona el resto del organismo, ya que cuando algo falla dentro casi siempre se manifiesta en la piel. Por eso una buena piel no solo es algo estético de ver, es además un signo de buena salud.
Para mantener una piel sana hay q empezar por la primera capa, la epidermis, la capa más expuesta a las agresiones y a la vista de todos. Para el cuidado de esta capa de piel tan importante hemos diseñado distintos protocolos de cabina ya que cada piel es diferente y necesita un tratamiento individualizado. Por eso prescribimos pautas específicas para cada paciente.
Contamos con una amplia experiencia en el cuidado de la piel, potenciada por el uso de la aparatología más avanzada.
En todos nuestros tratamientos se tienen además en cuenta las rutinas cosméticas domiciliarias del paciente y las condiciones cutáneas de cada piel ( lípidos, agua, estado de la barrera cutánea). En base a todos estos parámetros recomendamos y optimizamos los productos cosméticos adecuados al estado de la piel de cada paciente.