16 mayo, 2013 - Estilo de Vida, Noticias y Actualidad
BELLEZA Y BIENESTAR DURANTE LA MENOPAUSIA (IV)
ALIMENTACIÓN A PARTIR DE LOS 45:
LAS CLAVES DE LA DIETA ANTI-MENOPAUSIA
El Coaching Nutricional es, tal y como señalábamos en el anterior post, uno de los pilares del PLAN INTEGRAL PRO-AGING + ANTI-MENOPAUSIA de Clínica Mira+Cueto.En este caso concreto se tratará de plantear una reeducación alimentaria para aprender a comer de acuerdo a los especiales requerimientos de nuestro metabolismo que se modifica con la Menopausia, tendiendo, entre otras cosas, a retener mayor proporción de grasas.
Existen unas directrices generales aplicables a casi cualquier caso y muy útiles para contrarrestar los cambios físicos y anímicos derivados de la Menopausia. Entre ellos:
– Recurrir a una DIETA PROTEINADA (siempre bajo supervisión médica y durante el tiempo que el especialista recomiende en cada caso).Y es que este tipo de dieta resulta idónea para combatir las problemáticas de sobrepeso y obesidad habitualmente asociadas a la Menopausia. Primando las proteínas se consigue mantener y ganar masa muscular, combatir la flacidez y perder peso exclusivamente de la masa grasa.
– Tener ESPECIAL CUIDADO CON LOS AZÚCARES DE ABSORCIÓN RÁPIDA (sacarosa, fructosa, lactosa…) Y LAS GRASAS SATURADAS de origen animal (ternera, cordero, cerdo, mantequilla…) y algunas de origen vegetal (como los aceites de coco o palma) muy utilizados en conservas y productos de bollería industrial. Ambos, durante la Menopausia, nos engordan más que nunca, pues nuestro organismo, por los cambios hormonales, favorece la tendencia de convertir todo lo que ingerimos en depósitos de grasa de reserva.
– CONSUMIR ÁCIDOS GRASOS MONOINSATURADOS, que se encuentran sobre todo en el aceite de oliva, pues ayudan a combatir el colesterol ‘malo’ que tiende a incrementarse a partir de la retirada de la menstruación.
– POTENCIAR EL CONSUMO DE ANTIOXIDANTES que disminuyen el proceso de estrés oxidativo celular que acelera el envejecimiento y numerosos problemas de salud. Los encontramos en los frutos secos (fuentes de vitamina E o tocoferol), las hortalizas (como pimiento, tomate o calabaza) y las frutas amarillas (melocotón, albaricoque o melón) que aportan Betacaroteno. Sin olvidar las naranjas, fresas y kiwis, alimentos ricos en vitamina C, que, junto con las carnes magras, cereales y verduras, ricos en Zinc.
– CONSUMIR DE FORMA HABITUAL CEREALES, DOS O MÁS PIEZAS DE FRUTAS AL DÍA Y LA MISMA CANTIDAD DE VERDURAS para regular el tránsito intestinal que también tiende a alterarse durante la Menopausia.
– MINIMIZAR LOS FACTORES DESCALCIFICANTES(nutrientes que disminuyen el calcio), como son la ingesta elevada de sodio, presente en la sal común, el salvado de trigo y la cafeína.
– APOYAR EL PLAN NUTRICIONAL CON MICRO-NUTRICIÓN COMPLEMENTARIA: suplementos orales específicos para contrarrestar las alteraciones anímicas y mejorar el efecto del plan nutricional planteado. Entre ellas: Ácido Linoléico(disminuye la masa grasa a favor de la masa magra), complejos relajantes de plantas, aminoácidos y vitaminas (ideales para situaciones de estrés y para restablecer los ciclos de sueño), Isoflavonas(reestablecen el equilibrio hormonal de la mujer en periodo de premenopausia y menopausia), Borraja Casis (trata la sequedad dérmica) y Calcio (fortalece los huesos y combate la osteoporosis).