24 diciembre, 2015 - Estilo de Vida, Rejuvenecimiento, Retoques
2 tratamientos faciales para Navidad
La Navidad es una época de estrés y desgaste que acaba por dejar huella en el rostro y hace que se disparare la demanda de soluciones de belleza de emergencia, las conocidas como “fórmulas flash”. Lograr resultados ahora y ¡ya! es precisamente la promesa de los 2 tratamientos faciales para Navidad que hoy os contamos en nuestro blog: aptos tanto para hombres como para mujeres de cualquier edad que, poniendo en juego lo último en técnicas exprés de medicina estética y dermocosmética son capaces de borrar las huellas del cansancio, iluminar la piel y propiciar el ansiado efecto buena cara en un tiempo récord.
Microbótox efecto rostro relajado
Tal y como su nombre indica, la técnica del microbótox consiste en inyectar la toxina en forma de micro-dosis, empleándose Toxina Botulinica Tipo A en una formulación más diluida de lo habitual y realizándose una infiltración a nivel más superficial.Se emplea para tratar aquellas áreas en las que, sin requerirse disminuir la movilidad y la naturalidad de la propia expresión, se quiere lograr un efecto de expresión más relajada, fresca y descansada. El mapa de aplicación habitual dentro del protocolo completo incluye: frente, mejillas, mentón, cuello y escote.
El protocolo incluye también infiltraciones extra de ácido hialurónico y vitaminas antioxidantes para potenciar el efecto buena cara inmediato. Es un tratamiento de choque ideal en periodos de intensa vida social y, sobre todo, para hombres y mujeres de entre 30 y 45 años, cuyos rostros reflejan los síntomas del estrés, el cansancio acumulado y los primeros signos de envejecimiento (líneas de expresión, descolgamiento ligero, etc.) En cuanto a los resultados, se logra un efecto flash (inmediato) de piel suavizada y tersa al producirse un ligero tensado de la piel y la atenuación de las pequeñas líneas de expresión. En global, el aspecto es de rostro más relajado, fresco y descansado.
Máscarillas trasdérmicas de colágeno
Un tratamiento dermocosmético en cabina que tiene como ingrediente estrella un tipo exclusivo de máscaras oclusivas de colágeno cuya composición y diseño en forma de malla propician la absorción transdérmica de los principios activos empleados, promoviendo una penetración inmediata de los mismos y acelerando sus efectos. Es apto para todos los tipos de piel, el ritual se adapta a las distintas necesidades. Así, los ingredientes con que se enriquecen las máscaras de colágeno serán té verde puro triturado, vitamina C y sustancias humectantes (para aportar luz, reequilibrar la tasa de hidratación y oxigenar las pieles jóvenes más apagadas) o caviar y oro (para pieles maduras que, además de luz, precisan un efecto de reafirmación flash). En cuanto a los resultados, se potencia la luminosidad y la jugosidad de la piel de forma inmediata y evidente. Un efecto que se percibe nada más salir de la cabina y mantiene durante varios días.